El porqué del bajón de domingo y cómo sentirte mejor en lunes

El “no quiero ir a la escuela” de los niños toma una nueva dimensión cuando los “pequeñitos” tienen 30 años o más. Algo pasa el fin de semana que llegamos al lunes con el peor de los ánimos. Hablemos sobre el famoso bajón de domingo.

No eres el único. Ansiedad, miedo, sensación de vacío y hasta melancolía son algunos de los síntomas del bajón de domingo o sunday blues en el mundo anglosajón. Se trata de alteraciones físicas y psicológicas que, según los expertos, tienen una causa clara.

El fin de semana cambian los patrones de sueño y eso afecta nuestros biorritmos. Nuestro organismo no entiende qué está pasando y nos alerta ante una situación de peligro. Por eso estamos hipersensibles y respondemos de forma inesperada a la mínima provocación.

A eso hay que sumarle que el bajón de domingo tiene todo que ver con la forma en que nos alimentamos el fin. Tanta azúcar y grasa saturada hace mella en nuestro estado de ánimo. Puedes sentir pesadez, falta de concentración y una extraña tristeza que viene directo de todas esas calorías vacías.

Y aunque no está catalogado en los manuales diagnósticos, cada vez hay más profesionales de la salud que reciben a muchos pacientes con malestar general (y sin causa aparente) durante las últimas horas del domingo.

Si, además, el lunes “tienes” que volver a una vida que no te gusta, peor tantito. Una actitud negativa hacia tu trabajo o cualquiera que sea tu actividad de lunes a viernes, puede complicarlo todo. El bajón de domingo es seguro.

Además, el psicólogo Jaime Burque, a quien la revista Traveler cita, asegura que estamos culturalmente predispuestos a que el lunes sea un día pesado y, por supuesto, sufrimos su llegada.

Ahora bien, ya que conocemos la raíz del mentado bajón de domingo, hay que hacer algo al respecto. Son las pequeñas acciones las que pueden aliviarnos un lunes cualquiera, ¡toma nota!

 

  • Programa tu actividad favorita para los lunes. Asegúrate de que eso que tanto te emociona suceda justo al iniciar la semana, así es mucho más probable que te mantengas motivado.
  • Una buena rutina de ejercicio. Si ya atravesaste el bajón de domingo, no dejes que afecte también tu lunes. Al hacer ejercicio liberamos endorfinas que, a su vez, ayudan a controlar la ansiedad.
  • Mejora tus hábitos de sueño. Yo sé que es casi imposible pedirte que duermas temprano el fin de semana, pero si te desvelas solo el viernes, tendrás más tiempo para recuperarte e iniciar la semana con el pie derecho.

Y si nada de esto da resultado y tu bajón de domingo ya se convirtió en bajón de todos los días, es momento de replantear tu plan de vida y, quizá, buscar ayuda profesional para determinar qué está pasando. Todo tiene solución.