¿Soy demasiado joven para padecer cáncer de mama?

Seguro que has pensado “a mí no me va a pasar” y es que nos han contado que una edad avanzada es uno de los factores de riesgo más importantes del cáncer de mama, sin embargo, no es el único. Nunca eres demasiado joven para cuidar de ti.

Es verdad que el paso de los años puede hacer ciertos estragos en nuestra salud, pues según el Instituto Nacional del Cáncer, “la edad promedio al momento del diagnóstico (de cáncer de mama) es de 61 años”, sin embargo, ser una mujer joven no asegura que el cáncer se mantenga alejado.

No eres demasiado joven para cuidarte. Hay mujeres que han sido diagnosticadas con formas muy agresivas de este tipo de cáncer a los 20 años. Son pocas, es extremadamente raro, pero la probabilidad no desaparece y, por eso, debemos hablar.

Si tienes menos de 40, quizá pienses que hay poco que hacer respecto a la salud de tus pechos. No podrías estar más equivocada. Ser joven es una oportunidad para planificar la vida y, como prioridad, prevenir el cáncer de mama.

Algunas mujeres, debido a su historial familiar o estilo de vida, tienen un alto riesgo de padecer esta enfermedad. Pero recordemos que el cáncer es una enfermedad multifactorial.

No quiero alarmarte, pero es importante que sepas que el cáncer de mama tiene una incidencia cada vez mayor en la población femenina y representa una cifra creciente en personas jóvenes de acuerdo a estudios de la Clínica e Investigación en Ginecología y Obstetricia.

Matteo Lambertini, portavoz de la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO), asegura, además que “a las mujeres de menos de 40 años se les suelen diagnosticar tumores más agresivos”.

Ahora bien, eso no quiere decir que las tasas de supervivencia sean menores pero, sin duda, se trata de datos que deben llamar nuestra atención y conducirnos a la acción. Así que no eres demasiado joven para cuidar de tus pechos y evitar el cáncer de mama.

 

¿Por dónde empezar?

 

Sin duda, por la autoexploración; el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), sugiere empezar con esta práctica a partir de los 25 años de edad pero, por supuesto, puedes adelantarte algunos años debido a que se trata de una experiencia completamente indolora y sin efectos secundarios.

Y los pasos a seguir son los siguientes:

  • Es importante que conozcas tus pechos para que detectes, a la primera, cualquier tipo de anomalía que pudiera estar (o no) relacionada con cáncer de mama. Pon atención a la forma, tamaño y superficie de la piel. Hazlo con las manos detrás de la cabeza y con las manos en la cintura.
  • Puedes hacerlo frente al espejo o durante el baño. Detecta endurecimiento, hendiduras, irritación, piel de naranja, enrojecimiento, calor, agujeritos, bultos, venas crecientes, asimetría o secreción del pezón. El cáncer de mama se manifiesta de formas muy diversas.
  1. De pie. Hazlo con la mano derecha en la nuca y con la izquierda toca el pecho derecho, desde la axila y hasta el pezón. Haz lo mismo para explorar el seno contrario.
  2. Coloca una almohada o toalla enrollada debajo del hombro derecho, hazlo con la mano derecho en la nuca y, con la mano izquierda, palpa el seno derecho. Haz lo mismo con el seno contrario.

 

La recomendación del IMSSS es que te autoexplores 7 días después de tu menstruación. Algunas apps pueden ayudarte a tener registro y control sobre tu periodo y, por lo tanto, sobre tu autoexploración. Es el primer paso para prevenir el cáncer de mama.

Ahora bien, es clave que consultes a tu ginecólogo sobre tu caso particular pues, aunque el IMSS sugiere la mastografía a mujeres de entre 40 y 69 años de edad, hay algunos casos en los que se solicita a pacientes jóvenes.

Puede ser que tu médico considere oportuna una exploración clínica de las mamas, un ultrasonido, una imagen por resonancia magnética de las mamas o un estudio de termografía mamaria. Todos estos son métodos complementarios para que mujeres jóvenes mantengan alejado al cáncer de mama.

De modo que no son pocas las opciones que tenemos las mujeres jóvenes para cuidar de nuestros pechos. Y dado que octubre es el Mes de Sensibilización sobre el Cáncer de Mama, es el pretexto perfecto para recordarte que nunca es demasiado pronto para prevenir. Por cierto, si eres hombre, esto también es para ti.