Una pirámide con más de 1,000 años de historia colapsó debido a las extremas condiciones climáticas recientes.

 

Una de las pirámides más emblemáticas de la Zona Arqueológica de Ihuatzio, ubicada en Michoacán. Esta pirámide, construida hace aproximadamente 1,100 años por los antepasados del pueblo purépecha, sufrió daños significativos en su fachada sur debido a las intensas lluvias registradas en la cuenca del lago de Pátzcuaro.

Las intensas precipitaciones en la región, combinadas con altas temperaturas, provocaron grietas en la estructura de la pirámide. El agua que se filtró a través de estas grietas aceleró el deterioro, resultando en el colapso de la parte central de la fachada sur del basamento piramidal. Este evento ha afectado gravemente a al menos seis cuerpos escalonados de la pirámide, debilitando una de las estructuras más representativas del imperio purépecha.

El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha activado un protocolo de emergencia para evaluar los daños y comenzar los trabajos de restauración. Marco Antonio Rodríguez Espinosa, titular del INAH en Michoacán, anunció que el costo estimado para la restauración asciende a aproximadamente 3 millones de pesos, monto que se cubrirá en parte con el seguro de la zona arqueológica.